Bután es uno de los destinos más exóticos y enigmáticos del planeta. Situado a los pies del Himalaya, es imprescindible que el viajero conozca cuándo viajar a Bután, porque el clima varía notablemente a lo largo del año.
Primavera y otoño, por ese orden, son las dos estaciones más propicias para visitar Bután. En estas épocas el clima es más suave y el viajero evitará los dos grandes obstáculos climáticos de Bután: el frío y las lluvias. Para responder a la pregunta de cuándo viajar a Bután, el punto de partida es saber que la orografía de este pequeño país es muy montañosa y que un 70% del territorio son bosques.
El clima en Bután viene marcado por las diferencias de altitud existentes en el reino. Es subtropical en las llanuras meridionales y en las zonas más altas es templado. La temperatura irá descendiendo progresivamente según se acerque el viajero al Himalaya.
Cuándo viajar a Bután: primavera
En primavera encontramos la temperatura más agradable en Bután. Entre marzo y mayo las enormes extensiones de prados y campos se llenan de color con la explosión de la primavera y sus flores, una auténtica experiencia sensorial.
Cuándo viajar a Bután: otoño
Otoño es un buen momento para practicar senderismo en Bután. A pesar que el termómetro habrá descendido considerablemente, las precipitaciones propias del monzón ya pasaron, y la nitidez de la atmósfera será asombrosa. Por ello, el paisaje se puede observar con una enorme claridad, y los tonos ocre serán constantes que acompañarán al viajero.
Cuándo viajara a Bután: invierno
Es la temporada que se tiene que evitar. La temperatura es muy fría entre diciembre y febrero y las nevadas son constantes.
Cuándo viajar a Bután: verano
Entre mayo y septiembre la temperatura es agradable, pero el problema radica en la presencia de los monzones. Las lluvias serán abundantes y son habituales las crecidas de los ríos.