Viajar a la India en verano supone disfrutar de una época llena de celebraciones la India: Gangaur en Jaipur, la peregrinación Kanwar Yatra en el Ganges, Raksha Bandan, conocido como el festival de los hermanos… sin olvidar que en julio y agosto se puede visitar el Himalaya.
Estas son nuestras 6 razones para viajar a la India en verano
A continuación os ofrecemos 6 razones para visitar a la India en verano:
- Triángulo de Oro: Delhi, Jaipur y Agra. Los festivales que se suceden en julio llenan de colorido el país. Imprescindibles.
- Es la mejor época para visitar la India del Norte y el Himalaya. Ya se ha terminado el deshielo y el viajero puede llegar sin grandes problemas a los valles más recónditos.
- Pocas precipitaciones. El monzón trae lluvias en la costa occidental y Bengala, pero no tanto en la costa sudeste (Tamil Nadu) ni en el norte, donde los chubascos son esporádicos.
Puesta de sol en Jaisalmer ©Daniel Mennerich
- Conocer el extremo sur de la India. En agosto las lluvias ya son escasas y las zonas tropicales muestran todo el esplendor de su vegetación. Viajar a la India en verano es el momento ideal para visitar las plantaciones de té de los Nilgiri y comprobar cómo las mujeres ataviadas con llamativos colores recogen las hojas de esta planta.
- Día de la Independencia. El 15 de agosto se celebra en todo el país el Día de la Independencia. El pueblo indio proclamó su independencia del imperio británico en el año 1947. Al viajar a la india verano, el viajero podrá comprobar la solemnidad de este día, en el que además el pueblo tiene la costumbre de volar cometas para celebrarlo.
- Temporada baja. No hay que olvidar que el verano se considera temporada baja en la India, por lo que los precios de los vuelos suelen ser más económicos.
- Fiestas muy representativas. Viajar a la India en verano coincide con dos festivos muy simbólicos: el Año Nuevo Parsi y la fiesta de los lazos. El Año Nuevo Parsi representa el comienzo de una vida nueva tirando todo lo viejo y estrenando ropa nueva. La fiesta de los lazos se representa con el “rakhi”, un acto que consiste en atar una pulsera en la muñeca del prójimo y simboliza salud.
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